Maria Fernanda Matus, expresó gran preocupación sobre el regreso del uribismo en su más reciente columna para El Heraldo. Según la también modelo, el hecho que Álvaro Uribe y su séquito retornen al gobierno, ha generado múltiples dudas en gran número de sectores del país, especialmente en las minorías que muestran desde ya alta preocupación por varios de los nombramientos hechos por Duque.
Entre las preocupaciones más notables sobre las que opina Matus, es la del pronunciamiento del Mindefensa designado sobre las limitaciones que se harían a los mecanismos de protesta y movilizaciones sociales, los cuales considera como una de las principales herramientas de la oposición, minoría y ciudadanía con ánimo de expresarse. “Es un motor para la conquista de las libertades individuales”, agrega María Fernanda.
Esto claramente como referencia indignada de la posición del próximo ministro de Defensa, Guillermo Botero, quien desde ya ha causado gran preocupación tanto en los movimientos políticos alternativos, como de las minorías del país, que probablemente se verán limitados por las pretensiones del entrante ministro.
Matus recuerda la variedad de leyes y mecanismos existentes para la regulación de la protesta, los cuales disponen que se deben mantener ordenadas y sin violación del régimen constitucional, contrastado con la perspectiva que les da Botero, quien pretende simplemente limitarlas a que se desarrollen por los intereses generales de todos los colombianos, lo que considera un total desfase.
“Afirmar que la protesta es aceptable cuando esta representa los intereses de todos los colombianos es un desacierto y un atentado contra los pilares de la Constitución”, manifiesta la columnista.
Así entonces, en la columna nos recuerda como la protesta y la movilización social, ayudaron a conseguir grandes logros de la humanidad para otorgar derechos a las personas, como lo fueron múltiples reivindicaciones de derechos para la mujer, los afroamericanos, la comunidad LGBTI, los derechos civiles y demás, por lo que concluye que intentar regularlas de la manera como lo plantea el Ministro, será un total atropello a los derechos humanos y las libertades. Fuente consultada: ElHeraldo.