Tal como lo prometió semanas antes de su retiro de la presidencia, Juan Manuel Santos está dedicando su vida ahora a ser abuelo, padre, esposo y profesor, lo cual fue motivo para el exmandatario de tomar unas vacaciones junto a su familia en la ciudad de Miami, aunque posteriormente las interrumpirá para cumplir deberes académicos en Harvard.
Así lo informó en la carta que envió al presidente del Senado, Ernesto Macías, antes de abandonar el país.
No tenía idea de que un Presidente saliente tenía que pedir permiso para salir del país. Acá está la carta de Santos informando de sus viajes por estos días
— Luis Carlos Vélez ()
A pesar de lo mucho que dio para hablar a los uribistas la decisión del expresidente, quienes aún no avalan que pueda tomar unas vacaciones y aceptar invitaciones a conferencias, también ha generado comentarios positivos sobre cómo debe ser la vida de un exmandatario.
Santos y su familia han publicado en redes sociales las actividades que está desarrollando el Nobel de Paz en su visita a Miami, lo cual para muchos ha sido de agrado, pues contrario a la decisión que han tomado varios expresidentes del país, él prefirió acceder a un merecido descanso y realizar actividades como un ciudadano más.
Entre los planes de la familia presidencial estuvo el de un paseo en bicicleta, sobre el cual Santos montó una fotografía en la que se le ve bastante contento, lanzando inclusive un reto al héroe del deporte nacional Nairo Quintana, diciéndole “qué se tenga”, autoadulándose en tono de mofa sobre ser mejor ciclista que “nairoman”.
Otra de las fotografías que ha sido de las más compartidas, fue una tomada por su hijo menor Esteban, quien lo retrató mientras iba conduciendo él mismo un automóvil, sin escoltas, ni chofer, ni estrés presidencial alguno, sino como un ciudadano de vacaciones que quiere aprovechar el tiempo que ahora tiene para brindárselo a su familia y sus pasiones.
Rápido y Furioso 10: El Nobel
— Esteban Santos ()
Las imágenes del expresidente han dado para comentarios positivos, aunque también se prestaron para criticar a otros personajes de la política que no han tomado el mismo rumbo del Nobel de paz.