La corrupción tiene una característica muy especial y es la continuidad a través de figuras como el clientelismo. Los corruptos siempre buscan favorecer a las personas que les “devuelven el favor” o les colaboren con expandir su imperio de posicionamientos de interés, para así abarcar todas los ámbitos posibles y continuar su actuar delictivo.
Es de esta manera como los dos ex senadores de Córdoba, Musa Besaile y Bernardo ‘Ñoño’ Elias, pretenden dar continuidad a sus posiciones que fueron suspendidas por escándalos de corrupción, poniendo como remplazo a sus hermanos, para que estos aspiren al Congreso de la República avalados por el partido de la U, mismo partido de los dos encarcelados.
Musa Besaile, quien fue encarcelado por el escándalo del ‘cartel de la toga’, pretende dejar su puesto a John Moisés Besaile, su hermano, que ocupará el #8 en la lista del partido de la U para aspirantes al Senado.
Bernardo ‘Ñoño’ Elias, quien primero se especuló sería su esposa quien ocuparía la curul, decidió que se inscribiera el actual representante a la Cámara, Eduardo José Tous de la Ossa, quien fue su formula a dicha corporación en 2014 para que llegue al Senado en el puesto que hasta hace unos meses este político había ocupado antes de ser capturado, y también podrá a Julio Elías, quien es el hermano del ‘Ñoño’ para ser representante del departamento de Cordoba.
Dichas estrategias no son más que un movimiento del partido para conservar todos los votos que estos aportaban al umbral y como políticos. Cabe recordar que Musa Besaile fue quien encabezó las votaciones en 2014, y se aspira a que su hermano le de una continuidad similar a sus sufragios.
Con esto queda claro que la maquinaria política de los corruptos no tiene fin, que no importa las investigaciones en curso, ni penas impuestas, siempre tendrán cómo darle progresividad a su actuar delictivo y la corrupción que permea constantemente todas las instancias sociales y políticas del país, es por esto que se necesita cambiar a través de las urnas, y no permitir que los criminales tengan herederos en los altos cargos políticos.
