El ex procurador destituido y ahora precandidato presidencial, Alejandro Ordóñez, es tal vez la imagen más viva y estereotípica de lo que ha representado el Partido Conservador en Colombia. Controvertido por su homofobia, militancia por la quema de libros – y la defensa de esta actividad catalogándola como actos académicos-, crítico de cualquier acto que sea contrario al conservadurismo en el país. Un opositor total del progresismo y las ideas diferentes a lo tradicional.
Con tantas actitudes que lo alían prácticamente con cualquier radical de la derecha y ultraderecha del país, Ordóñez tenía de algún modo que relacionarse con otro de los líderes de los ideales antiprogresistas y violentos como Álvaro Uribe, y qué mejor forma de hacerlo que definiendo su posición de apoyo al paramilitarismo.
Tal como lo daría a conocer a través de su cuenta de Twitter el concejal de Bogotá Hollman Morris, el ex procurador ya tenía bastante clara desde hace tiempo su posición respecto a las autodefensas en Colombia, que no es otra cosa sino que el apoyo rotundo, a tal punto, que sus opiniones son presentadas en medios públicos con toda la confianza posible.
“No podemos desconocer que las auto-defensas se ajustan a las normas de la moral social, del derecho natural y de nuestra legislación positiva, pensar lo contrario es por decir poco, una absurda ingenuidad”, expresó para Vanguardia Liberal Ordóñez en 1987, momento en el que desempeñaba como Concejal.
Ordóñez entonces, no sólo siempre se ha mostrado a favor de los paramilitares, sino que se muestra extrañado por las personas que no justifican la formación de este tipo de grupos armados, expresando como justificación que si las personas no toman las armas por su cuenta, sería condenarlos a morir. Porque claro, incitar a los colombianos a tomar las armas no ha implicado la pérdida de más vidas –sarcasmo-; la gran facilidad que tienen los radicales de la derecha –o de izquierda- de apoyar las guerras mientras a ellos no los toquen.
Siempre ha estado claro para todos que Ordóñez es un hombre de apoyo a la violencia. Conservación de la falsa moral, de los ideales negativos de la religión y de la militancia contra todo lo que no esté acorde a sus ideales, y con destacar esta posición de Ordóñez respecto al paramilitarismo en Colombia, sólo tiene como objetivo que no olvidemos quiénes son los que pretenden gobernar este país y cual es su forma de pensar, si realmente estamos dispuestos a dejar a alguien así en el mando de un país que ya quiere un cambio de paradigma para el favorecimiento de la paz.
Una querida amiga me daría a conocer la declaración de Alejandro Ordoñez como Concejal de Bucaramanga, donde apoyaba las autodefensas del Magdalena medio. Vean este recorte prensa de vanguardia liberal en 1987.
— Hollman Morris ()